Comienza la fumigación contra la procesionaria
La Entidad Urbanística de Altorreal hacía público en la mañana de hoy martes 14 de noviembre que se habían comenzado las labores de fumigación contra uno de los problemas habituales de nuestra urbanización en la época otoñal: la procesionaria. Estas orugas están cubiertas de pelos urticantes que se desprenden y flotan en el aire, por lo que pueden provocar irritación en oídos, nariz y garganta tanto en los seres humanos como en nuestras mascotas, así como intensas reacciones alérgicas. La sustancia que le confiere esta capacidad urticante es una toxina termolábil denominada Thaumatopina.
Como decimos, hay que tener especial cuidado en las inmediaciones especialmente de pinadas, aunque pueden estar en cedros y abetos, con nuestros pequeños de la casa y en los paseos con las mascotas, ya que las orugas, suelen llamar la atención de éstos en su forma de desplazarse.
Las orugas tienen comportamiento social, de modo que durante toda su vida larvaria establecen interacciones cooperativas normalmente con sus hermanas de puesta. También de forma general, desarrollan toda su vida larvaria sobre un mismo árbol, y solo lo abandonan para hacer la procesión de pupa o bien para buscar un pino contiguo si han agotado la totalidad de las acículas del pino donde nacieron (esto solo ocurre en árboles de muy pequeño porte o cuando hay varias puestas sobre un árbol de no mucho porte).
Si entras en contacto con los pelos urticantes del insecto, lo primero que debes de hacer es lavarte de forma enérgica con agua y jabón para poder retirar los pelos que pudieran haberse quedado adheridos a la piel. Te emplazamos a que acudas al médico puesto que los casos más leves podrán tratarse con una simple pomada con corticoide, pero en personas sensibles puede complicarse debido a una reacción alérgica. Especialmente grave puede ser para las mascotas, sobre todo los perros, si no se atienden los primeros síntomas, que suelen ir de irritación en la zona, inflamación en labios y lengua así como salivación excesiva. Hay que llevarlos urgentemente al veterinario puesto que la lengua puede necrosarse.
Es una noticia de la redacción de VivoEnAltorreal.com
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